Descripción
Imagina una ensalada que combina la cremosidad del aguacate con la dulzura de las fresas frescas y la suavidad de la mozzarella. Así es esta ensalada, una opción refrescante y vibrante que se convertirá en el protagonista de tus comidas. Este platillo es fácil de preparar y perfecto para cualquier ocasión, ya sea una comida ligera, un almuerzo al aire libre o una cena elegante.
La ensalada de aguacate, fresas y mozzarella destaca por su versatilidad y su capacidad de adaptarse a los gustos de cada quien. La mezcla de aguacate, fresas y mozzarella crea una armonía de sabores que explota en tu boca con cada bocado. Además, la incorporación de un aderezo ligero a base de aceite de oliva, limón y miel añade un punto de sofisticación y frescura que la hace irresistible.
Aquí te compartimos una receta irresistible que hará que tus invitados pidan más.

Conclusión
Ingredientes para 2 personas
- Lechuga hoja de roble o similar
- Rúcula (al gusto)
- 10 Fresas
- 20g Piñones
- Mozzarella fresca en formato mini8
- 1 Aguacate
- Arándanos (al gusto)
- Semillas de sésamo (al gusto)
- 45 ml Aceite de oliva virgen extra
- 15 ml Vinagre de Módena
- 5 ml Miel
- Sal
- Pimienta negra molida
Preparación
- Lavamos las hojas de lechuga para retirar los posibles restos de tierra.
- Escurrimos y secamos bien.
- Retiramos la parte dura de cara hoja, quedándonos solo con lo verde.
- Disponemos sobre la base de dos platos y, sobre ellas, colocamos unas hojas de rúcula (cantidad al gusto).
- Preparamos una vinagreta con el aceite, vinagre, miel, sal y pimienta y condimentamos las lechugas, reservando un par de cucharaditas para el final.
- Lavamos las fresas, retiramos las hojas y el pedúnculo y cortamos en cuartos.
- Escurrimos las bolitas de mozzarella sobre papel absorbente y las cortamos por la mitad.
- Tostamos los piñones en una sartén, a fuego medio, removiendo de vez en cuando y cuidando que no se quemen.
- Cortamos el aguacate longitudinalmente, retiramos el hueso y la piel.
- Laminamos cada mitad y las colocamos en el centro de los platos, sobre la rúcula.
- A ambos lados colocamos las fresas, la mozzarella y unos arándanos, que aportan un toque dulce estupendo.
- Decoramos con los piñones tostados y semillas de sésamo.
- Regamos con una cucharadita de vinagreta y servimos inmediatamente.